VALOR Y PRECIO

VALOR Y PRECIO

Hace algunos artículos hablaba de la diferencia entre inversión y gasto ya que suelen confundirse. Siguiendo en esta línea, el propósito de hoy es explicar y aclarar en qué se diferencia el valor y el precio que tiene cualquier cosa. En muchos casos ambos términos se utilizan, erróneamente, de una manera indistinta.

En nuestros días todo tiene un valor pero no todo tiene un precio. El precio que ponemos a algo es nuestra forma de cuantificarlo, que puede ir de más barato a más caro. Por ende, solemos cuantificarlo económicamente. El precio de un Ferrari es de tantos euros y el de un kilogramo de arroz apenas de unos céntimos. Es por esto que suelen confundirse pues otorgamos a lo que tiene un precio muy caro un gran valor. Para muchas personas cuanto más caro es algo, más valor tiene.

Sin embargo, esto no tiene porqué ser así. Muchas de las cosas con un gran valor no tienen ningún precio, son GRATIS. Más bien tiene que ver con la satisfacción y la felicidad que nos produce. Por ejemplo, gozar de un excelente estado de salud, el amor de un ser querido, una llamada inesperada de alguien a quien echas de menos, contemplar un amanecer, esa amistad irremplazable, etc. Cuanto mayor gozo nos proporcione y más duradero sea este en el tiempo más valor le otorgaremos.

Por ello, podría decirse que el valor es algo subjetivo y que no tiene nada que ver con el precio de las cosas. De hecho, numerosos estudios demuestran que cuando adquirimos algo nuevo, como un móvil de última generación o el coche de nuestros sueños, el nivel de subida en las hormonas de la felicidad dura como máximo tres meses. Después de ese tiempo volvemos al nivel de insatisfacción en el que nos encontrábamos antes, aunque lo hayamos adquirido a un precio muy elevado. Sin embargo, aquello a lo que otorgamos un gran valor, independientemente del precio, sí nos hará sentir plenos.

Raquel Izquierdo Dasí

@raquelidcoach  #TuGranPoder