LAS CINCO HERIDAS EMOCIONALES DE LA INFANCIA II

LAS CINCO HERIDAS EMOCIONALES DE LA INFANCIA II

En el artículo anterior explicaba cómo desde la infancia se forjan las heridas emocionales. Mencioné que estas heridas van acompañadas de unas «máscaras» cuya finalidad es ocultar la vulnerabilidad derivadas de dichas heridas. 

¿Cuáles son estas máscaras?

• Si se tiene la herida del rechazo la máscara es la de huidizo.

• Si se tiene la herida del abandono la máscara es la de dependiente.

• Si se tiene la herida de la humillación la máscara que se usará es la del masoquista emocional o mental.

• Si la herida que se tiene es la de la traición la máscara utilizada es la del controlador.

• Para la herida de la injusticia la máscara usada es la del rígido.


¿Cómo podemos sanarlas?

• Observando todo aquello que se presenta en nuestra vida: Lo que hay en nuestro escenario vital tan solo habla de uno mismo.

• Reconociendo que lo que vemos fuera está en nosotros: Por ejemplo, si una persona solo encuentra parejas que la abandonan debe preguntarse: ¿A quién o qué he abandonado?, ¿en qué me estoy abandonando?

• Aceptando que se tiene esas heridas: Cuando una persona acepta que posee una conducta, un patrón o una creencia fuertemente arraigada fruto de una herida emocional comienza su sanación.

• Abandonando el victimismo: muchas personas vuelcan su frustración contra aquel que les está reflejando una o varias de sus heridas. Es decir, reaccionan ante el «mensajero» en lugar de recoger e interpretar el «mensaje». En realidad es un gran regalo cuando se presenta una situación difícil porque así podremos darnos cuenta de lo que aún no hemos resuelto en nuestro interior. 

• Observando qué máscara nos ponemos ante una situación que nuestra mente dual interpreta como dolorosa o incómoda. Una vez reconocida la herida y la máscara podremos elegir no usarla más y volveremos a ser nosotros mismos.


Se trata de un camino de trabajo interior y de introspección desde la absoluta honestidad. La recompensa es ser tú mismo sin heridas, sin máscaras y sin filtros. 


Raquel Izquierdo Dasí

@raquelidcoach